Kedleston Hall
Atracción | Derby | Inglaterra | Reino Unido
Arquitectura clásica cerca de Derby
Kedleston Hall es una impresionante mansión cerca de Derby en Inglaterra, considerada una obra maestra de la arquitectura neoclásica y uno de los sitios históricos más importantes de Gran Bretaña. Está situada en medio de un paisaje de parque idílico en Derbyshire y ha sido la residencia de la familia Curzon durante siglos, cuya historia está estrechamente ligada a la propiedad. Hoy en día, Kedleston Hall está bajo la administración del National Trust y ofrece a los visitantes una profunda visión de la aristocracia británica, la arquitectura del siglo XVIII y las conexiones culturales e históricas del país, especialmente con el Imperio Británico.
Sitios históricos en Gran Bretaña
La mansión fue en su mayoría construida entre 1759 y 1765, bajo la dirección del renombrado arquitecto Robert Adam, quien es considerado uno de los principales representantes del estilo neoclásico. Originalmente, Kedleston Hall iba a ser un palacio aún más grande, pero la construcción se detuvo después de completar el edificio principal y un ala. Sin embargo, la propiedad impresiona con su imponente fachada, caracterizada por una serie de columnas clásicas y un pórtico central, inspirado en los antiguos templos romanos. El encargante, Nathaniel Curzon, primer Barón Scarsdale, quería mostrar su poder y riqueza con esta construcción, y el resultado es un edificio que emana elegancia y grandeza.
Cultura e historia de la aristocracia británica
En el interior de Kedleston Hall, los visitantes encontrarán una decoración opulenta que refleja la riqueza y el gusto de la familia Curzon. El salón de mármol es sin duda el corazón de la casa: con más de 12 metros de altura, 20 columnas blancas de alabastro y un techo abovedado bellamente elaborado, parece una basílica romana. Esta sala se utilizaba para recepciones sociales y está decorada con estatuas y estucos que refuerzan la impresión de un templo antiguo. También impresionante es el gran vestíbulo, adornado con pinturas de importantes artistas como Anthony van Dyck y Joshua Reynolds. Los diversos salones y habitaciones están equipados con muebles finos, tapices y porcelana que ilustran el estilo de vida del siglo XVIII. Destaca especialmente la colección de artefactos indios, reunida por George Curzon, quien luego se convertiría en virrey de la India, durante su tiempo en el Imperio Británico. Estos objetos, incluyendo muebles, armas y obras de arte, se exhiben en el llamado "Museo del Este" y son testigos del pasado colonial de la familia.
Visitar los jardines de Kedleston Hall
Los extensos jardines y el parque circundante son otro punto destacado de Kedleston Hall. El terreno fue diseñado por el arquitecto paisajista Lancelot "Capability" Brown, uno de los más influyentes de su época. El paisaje del parque se extiende por cientos de hectáreas e incluye suaves colinas, lagos artificiales, puentes y grupos de árboles que crean una escena armoniosa y casi romántica. Dentro de los jardines también hay estructuras más pequeñas como la casa de botes y los jardines de recreo, que invitan a pasear por senderos, parterres y una zona de naranjos. Para los amantes de la naturaleza, la propiedad ofrece una variedad de senderos que atraviesan prados y bosques, a menudo animados por ciervos y aves.
Artefactos indios en el museo oriental
La historia de Kedleston Hall es también una historia de continuidad. La familia Curzon vivió aquí durante más de 700 años, y aunque la propiedad es ahora de acceso público, una parte de la casa sigue en manos privadas de los descendientes. Esta conexión con el pasado es palpable, por ejemplo, en los retratos familiares conservados o en los muebles originales. El National Trust ha hecho hincapié en preservar la casa y su entorno de la manera más auténtica posible, para que los visitantes puedan hacerse una idea de cómo era la vida de la alta sociedad en la era georgiana.